Ayer me ocurrió una de esas cosas sorprendentes, una conjunción de hechos con final feliz. Seguir leyendo «Final feliz»
Diciembre…
Acabó diciembre y con él, el año. Seguir leyendo «Diciembre…»
Noviembre…
Bosques y campos, antes de desprenderse de sus hojas hacia el periodo hivernal, ofrecen un espectáculo visual multicolor inigualable. Época maravillosa para la fotografía de naturaleza por los bellos colores que se pueden captar.
Octubre…
Empieza el otoño. Las últimas frutas del año aparecen en los bosques, los coloridos madroños manchan los tonos verdes y marrones de los árboles. Si el verano ha sido lluvioso aparecen las preciadas setas. Época ideal para disfrutar de largas excursiones por el bosque.
Septiembre…
El verano empieza a despedirse. Lluvias, cielos cambiantes, paisajes que empiezan a transformar su colorido y fisonomía. Actividad en los campos, vendimia, frutos secos…
Agosto…
Volverán las oscuras golondrinas
de tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a tus cristales,
jugando, llamarán.
Esos increíbles pajarillos, pueblan el cielo en verano, y llenan el silencio con sus risas y cuchicheos.Qué maravilla el verano..
Julio…
Frutos multicolores, jugosos y riquísimos, en huertos improvisados en cualquier espacio de terreno abonado. Sol, calor, agua, qué más se necesita para vivir…
Junio…
A la explosión de la flora sigue la de fauna.
El campo se llena de mariposas y todo tipo de insectos, los renacuajos se han vuelto ranitas, los rayones acompañan a sus madres.
Explosión de vida, de calor, ropa fuera, llega el verano…
Mayo…
Los colores se intensifican, empieza a subir la temperatura.
Es el mes en que cumplo años. Este año fue duro, subí al cuarto piso, me dio vértigo, pánico y ansiedad. Pero a seis meses vista ya no parece tan grave. El tiempo todo lo relativiza…
Abril…
Primavera. Todo es explosión, luz y color. Olor a fresco a flores, a renovación.
Emociones a flor de piel, montaña rusa emocional…